
Pero la cosa no terminó aquí…
después de colarnos en el photocall y sacarle una sonrisa a Tarzán, nos fuimos
a comer al Foster’s Hollywood… fingers de pollo, patatas fritas, hamburguesas,
costillar, sándwiches, helados… cada uno pudo elegir lo que más le apetecía.
Menuda mesa nos montaron, ocupaba
casi todo el restaurante y es que, ¡fuimos 40 personas!
El planazo se lo tenemos que
agradecer a nuestros queridos voluntarios de Barclays que nos acompañaron…
¡¡les adoramos!!